Reflexión sobre: el porno, la educación sexual y las series

Las ultimas series que he visto me han llevado a reflexionar mucho sobre la sexualidad. Sobre la sexualidad feminista (esa en la que prima el respeto hacia cualquier género) e incluso en porno feminista.

Según terminé de ver Easy, me puse la serie documental Hot Girls Wanted, que ha sido denominada como la Black Mirror del porno, y es que, a pesar de vivamos en la era de la información, la sexualidad parece, aún, un tema tabú. Y mucho más desde
que entró en escena la famosa “Ley Wert”. Desde entonces, los planes educativos de nuestro país han omitido la educación sexual de nuestras aulas… El sexo es intrínseco en el ser humano y aunque debamos plantearlo siempre acorde a nuestra edad, no hay que obviarlo.

Leía estos días en El País, "lo lejos que estamos de Noruega. Mucho más de los 3.067 kilómetros de ruta. La NRK, la televisión pública del país, tiene en su parrilla Newton, un programa dirigido a niños entre 8 y 12 años que ha emitido la serie Pubertet (Pubertad). Ocho capítulos con los que los adolescentes noruegos aprendieron todo lo que deben saber sobre sexualidad". (Casi como aquí).

El porno desde el principio de los tiempos ha sido y es machista. Desde la pubertad, cuando despierta tu consciencia sexual, tomas como referencias este tipo de producciones, pensando que eso es sexo. Un hombre como macho alfa, satisfaciendo todos sus deseos, mientras ella grita (no sabemos si de dolor o de qué) sin obtener ningún tipo de placer. Recuerdo que siendo adolescente, una vez topé con el final de una película X. Lo cierto es que el contenido me dejó traumatizada... y no estaba segura de si eso que pasaba me tocaría imitarlo.

El tema, es que yo, como adolescente, me creé una imagen del sexo errónea, distorsionada e insana.

Y lo que realmente me preocupa de todo esto, es que la desinformación o mal-informacion con la que nuestros jóvenes tratan la sexualidad, en mi opinión, tiene algo o mucho que ver con sucesos como las violaciones que acontecieron en los San Fermines. Como las encuestas que sacan a la luz, que la generación venidera es incluso más machista que la de nuestros padres, o incluso la mala gestión en cuanto a juegos como “el muelle” y otro tipo de barbaridades que se basan en canciones reggaetoneras que promueven este tipo de comportamientos.

Pero no hablo solo del cine para adultos. Sin ir más lejos, la serie que tanto revuelo ha causado últimamente, "13 reasons why" (una serie adolescente) se ha vendido como una producción que trata el acoso escolar, cuando en mi opinión, todo tiene que ver con las agresiones machistas que sufre la protagonista. Desde filtraciones de fotos intimas, comentarios sexistas, incluso (ALERTA SPOILER) a violaciones... Y en ningún momento se menciona la palabra machismo... Es de traca.

Por suerte, una de las sorpresas con las que he topado este año, y se ha colado en mi top 10 de series, es mi adorada "Girls". En ella, si que he podido disfrutar como espectadora de una sexualidad sana. Real. Donde muestran el sexo de manera natural, libre y responsable. Donde las mujeres no somos 90-60-90. Donde las parejas son torpes, divertidas y sexis cada una a su manera. Y no se ciñen a lo que hasta ahora nos habían contado.

A toda la anterior reflexión me planteo que papel podemos tener y la forma de poder ayudar, personas como yo, que por nuestra profesión tenemos un poco más de visibilidad, contra la mala información sexual que le está llegando a nuestros jóvenes. Desinformación que está consiguiendo desnaturalizar el sexo. El acto más bonito, placentero y natural que puede practicar el ser humano.

¿Piensas que la información que nos llega del sexo es la correcta? ¿Podemos ayudar desde nuestra posición a mejorar algo? Voy preparando un café con hielo que hace mucho calor.